Actualmente, los tratamientos y procedimientos quirúrgicos para corregir algún problema visual son muy avanzados. Tanto en cuidados previos como posteriores, los riesgos son mínimos. Sin embargo, todavía existen muchas dudas con respecto a los riesgos de una cirugía ocular. Una de las más comunes es si existe la posibilidad de quedar ciego.
Hoy por hoy, las cirugías oculares tienen excelentes perfiles de seguridad y muy altas tasas de éxito. Existen diversas alternativas dependiendo de la afección o gravedad de la misma. Algunos procedimientos están diseñados para tratar la miopía (visión corta), otros para la hipermetropía (visión de lejos) y existen también cirugías para el astigmatismo.
En cuanto a las complicaciones que pueden surgir y que son una amenaza para la vista tras una cirugía, tal como la pérdida significativa de la visión, se puede decir que son muy raras. Muchos efectos secundarios y complicaciones de la cirugía ocular se resuelven con una cirugía adicional o con tratamiento médico.
Sin embargo, como cualquier procedimiento quirúrgico, también existen posibles riesgos, efectos secundarios y limitaciones de las cuales el paciente debe estar plenamente consciente antes de someterse a la cirugía ocular deseada (de hecho, esto se aplica para cualquier tipo de cirugía). En este sentido, se debe elegir un cirujano ocular especializado y con experiencia en cirugías con el fin de ayudar a reducir estos riesgos y que se obtengan los mejores resultados posibles de la cirugía ocular.
Ante esto, el primer paso es determinar si el paciente es un buen candidato para la cirugía de corrección de la visión. El médico debe realizar un minucioso examen diagnóstico de la vista para determinar si la persona es un candidato apropiado para la cirugía. En este examen se evaluará: la forma y el espesor de la córnea, los errores de refracción y el tamaño de la pupila, la humectación de los ojos (para comprobar si tiene el síndrome del ojo seco), su salud general e historial médico, así como cualquier medicamento que esté tomando.
Los resultados obtenidos permitirán saber cuáles son los alcances o los riesgos de intervenir al paciente. También podrán determinar las alternativas para dar una solución eficaz a la persona afectada. Si aún tienes dudas al respecto, te invitamos a acercarte con tu médico de confianza, quien te dará todas las opciones adecuadas.